lunes, 28 de noviembre de 2011

PREGUNTA Nº 3

¿LA NIEVE ES SIMÉTRICA?

Estamos esperando que venga la nieve para ir a esquiar, para disfrutar de los paisajes nevados... Lo que no me podía imaginar es que se pudiera disfrutar observando un copo de nieve.
- ¡Mira!
- ¿Qué ves?

Me quedé sorprendido, porque yo creía que la forma que tenían los copos de nieve, esas formas geométricas y simétricas... era cosa de los adornos en los belenes, o en los cristales de las clases de primaria en vísperas de la vacaciones de Navidad.

Y aquí viene la pregunta:

¿Los copos de nieve tienen algún tipo de simetría?
¿Cómo son, en realidad los copos de nieve?
¿A qué se debe esa forma tan especial y espectacular?

Espero tus respuestas... Si tu respuesta es acertada y llega antes del 12 de diciembre a las doce de la noche, tendrás un premio... de + 0,2 en el primer examen de la segunda evaluación...¡Ah! y si no eres uno de mis alumnos, puedes responder ... pero sin premio ;)

martes, 22 de noviembre de 2011

RESPUESTA A LA PREGUNTA 2

EL TAMAÑO DE LA LUNA 


La Luna parece tener un tamaño mayor cuando está sobre el horizonte respecto a cuando está en el cenit. La causa de este fenómeno no es, como a menudo se supone un resultado del efecto de la ATMÓSFERA, que en cambio sí es responsable de su enrojecimiento, pues por causa del efecto Rayleigh las moléculas del aire absorben mucha más luz azul que roja.

Cuando la Luna o el Sol están más próximos al horizonte se perciben más rojos, dado que los rayos de luz tienen que atravesar un espesor mayor de atmósfera. Tampoco el causante es la refracción, por la variación de la trayectoria de la luz debido al cambio de medio.
La causa es una ilusión óptica investigada, como he dicho antes, en psicología de la percepción.Es por eso que a las 10 de la noche te pareció ver la luna mucho más pequeña, porque se encontraba justo encima de ti, en el cenit. Y a las 7 de la tarde, cuando salía, era mucho más grande. Por lo que no tiene que ver con las órbitas circulares.También se puede decir que para la correcta percepción del tamaño de un objeto es importante disponer también de información correcta sobre la distancia real al observador. 
 
El cerebro humano calcula el tamaño de los objetos a partir del tamaño de la imagen proyectada en la retina y del conocimiento disponible acerca de su distancia, dado que un objeto más cercano a la retina produce una imagen de mayor tamaño que uno más alejado, el cerebro, empleando la experiencia, interpreta que está más cerca. Como la Luna está siempre a unos 385.000 km de distancia de la Tierra, el supuesto cambio de tamaño de la Luna dependiendo de su cercanía al horizonte es una ilusión.
MARÍA PARRA